Resumen |
"Desde la antigüedad, el hombre le otorgó cualidades y defectos propios a los animales que lo rodeaban. Así, por ejemplo, el zorro personificó la astucia; el búho, la erudición; el león, la fuerza; el lobo, la voracidad; el perro, la lealtad; el asno, la terquedad; la hormiga, la constancia, y la abeja, la laboriosidad. Los animales son protagonistas así de 100 historias sorprendentes." |